Han visitado mi rinconcito...

sábado, 25 de mayo de 2013

Receta postre presentado en vaso.Mousse de gofio.

Hola. Esta vez si, me he animado, voy a poner mi granito de arena en el blog de Ira, en este carnaval, titulado El ingrediente secreto. Aporto esta deliciosa receta de MOUSSE DE GOFIO. Me tira la tierra, jajaja.

La foto la he sacado de internet porque mi tiempo de cocinillas es muy escaso, ahora soy mamá a tiempo completo. He rescatado la receta de mi libreta de recetas, que aún conservo.

Espero que os guste. Es sencilla y muy deliciosa.

INGREDIENTES:

-500 gr. de nata .
-4 cucharadas de gofio.
-1/2 lata de leche condensada ( si usas la lata grande).
Para adornar, usaremos almendras picadas y miel (opcional, la miel).

PREPARACIÓN:

En un bol ponemos la leche condensada, le añadimos el gofio y lo mezclamos bien. 
Montamos la nata y la añadimos poco a poco a la mezcla anterior, con movimientos envolventes. 
Vertemos la mezcla en copas o vasos y, adornamos con almendras picadas y unas gotas de miel, si queréis. ¿Sencillo, verdad?.


Saludos.

domingo, 12 de mayo de 2013

Objetos inútiles que en su día compré..

Hola, hoy me gustaría hacer mención a una serie de productos u objetos, que, en su momento adquirí, movida por mi síndrome de madre primeriza, debió ser. Porque pensándolo bien ahora, ¿para qué diablos me gaste un dinero en estas cosas tan, tan, inútiles?.

A ver por donde empiezo, ahí sí, empezaré por la cuna. ¿La cuna?, pues sí, señores, de saber que mis dos retoños no la iban a usar jamás, me hubiese ahorrado unos 600€, fíjense por donde. Y cuando digo que no la hemos usado, es que es verdad; era rozar el colchón, y... Ojiplàticos los dos, como diciendo: " a ver mami, si estoy aquí tan a gustito, dormido en la tetita y junto a ti, no entiendo por qué, me pasas a un colchón frío y solitario..".

Otro de esos absurdos objetos, que encima ocupan mucho espacio, es el parque. Sí, esa especie de corral donde nos empeñamos en meter a los peques con un trillón de juguetes. Que en nuestro caso sirvió más de zona de almacenaje de juguetes que para el juego...

Una de mis adquisiciones estrella, fue un osito, que reproducía los sonidos del útero materno. Allí fui yo, rauda y veloz a la tienda a adquirir lo que yo ya suponía la solución a los despertares de mi peque mayor. Jajajajaja....

El champú y la crema de lavanda de una famosa marca de bebés que anunciaba que bañando al niño con su gel y untándo luego su cuerpecito de crema de lavanda, dormiría del tirón. Jijiji....

Biberones de diferentes formas, tamaños, colores y tetinas. Leches de fórmula, de distintos sabores y componentes, chupetes, hierbas anti cólicos, cucharas de mil colores, platos, babis, papillas....

Rebuscando en mi baúl de los recuerdos, he encontrado peluches, que en su momento compre porque pensaba que mi peque necesitaba una figura de apego, ¿para qué?. Los niños de pecho ya tiene a su figura de apego: LA TETA.

Uy, no puedo olvidarme de dos maravillosos CDs que compre con muchísima ilusión. Se trataba de canciones de cuna, con las que tu bebé caería frito del sueño. ¡Ay, madre, que lo pienso y esque me dan ganas de tirarme yo misma de los pelos!.

El carro de 1000 y pico euros. ¿Para qué?, pesaba mucho, era grande, subir y bajar escaleras era terminar sudada como un pato. Y, al final, terminas comprando un carro de paseo mucho más barato y ligero. Y, nada que decir del capazo.... Nosotros con un buen porta bebés nos hubiésemos apañado la mar de bien, y, por sólo 60€.
Ahora que nombro los porta bebés, dos mochilas colgonas tuve yo. ¡Qué dolor de todo!, ¿pero para qué las venden?, no sirven. Tú, acabas con dolor de cuello, cintura y espalda. Los bebés, van literalmente colgados, es imposible que a un bebé le guste ir colgado ahí.

De los pañales, más de lo mismo, cuanto más caros y más publicidad les hagan, peores son. Con mi peque mayor usé la marca D. (No voy a nombrarla), y muy mal. Unas dermatitis horribles, creo por los tintes y demás sustancias vete a saber súper tóxicas que ponen para absorber tantas horas de pis.

En fin, que seguramente podréis imaginar, que con mi peque menor, he prescindido de todo lo mencionado.

Ya decía mi padre que no comprase nada hasta que naciese el bebé y lo fuese conociendo. ¡Cuánta razón!.

Saludos a tod@s.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Mis dos lactancias "prolongadas"

Hola, creo, creo, que mis tetis, sólo "descansaron", 5 meses. ¿Qué por qué digo esto?, pues veréis, mi peque mayor dejó voluntariamente su teta ( sí, sólo una, la derecha, porque según él la izquierda estaba " mojada" ), cuando ya contaba con 3 años y 7 meses, encontrándome yo, en mi segundo trimestre de embarazo. Recuerdo que, fue él mismo quien soltó su teti, me miró y dijo: " mami, de esta teti no sale leche , sólo sale aire".

Su destete, para mí, fue una sensación rara. Guau, llevábamos casi cuatro años compartiendo este maravilloso regalo que es la lactancia. La teta era nuestro momentito de máxima intimidad, de regalarnos cariño, miradas, cosquillas, besos... Mi niño decidió que había llegado el momento, me costó asimilarlo, pero, respeté su decisión. ¡Qué sensaciones más extrañas me invadieron durante semanas!. Sí, yo echaba de menos, esos momentitos tetiles. Ese sentimiento de amor profundo que se experimenta cada vez que das teta, ese orgullo de que, como madre, le estás regalando vida, amor, seguridad a tu hijo. Un regalo que es recíproco.

Sin embargo, 5 meses después, iniciamos una nueva lactancia, gracias a mi peque menor. Dieciséis meses después, seguimos teteando, hasta que ella decida que, también ha llegado su final.

Lo gracioso de todo esto, es que, hace 5 años, yo era una de esas embarazadas que tenía clarísimo que la teta duraría máximo 4 meses ( jajajajaja ). Mi primera lactancia tuvo unos inicios desastrosos: mi peque se quedaba dormido nada más ponerlo al pecho, tuvimos que superar una hospitalización de 12 días, en los cuales yo no podía estar con mi bebé, introdujeron biberones, mi depresión post parto, las opiniones de madre y suegra, tías, padre y demás, entendidos en cómo criar, ser primeriza y estar mal informada, no confiar en tu cuerpo, desconocer que mi peque no se quedaba con hambre, que lo normal es querer brazos, dormir con mamá... Menos mal que descubrimos a San Carlos González, nuestro salvador. A partir de la lectura de sus libros, me di cuenta que teta, colecho y apego, eran lo que mi peque y yo deseábamos hacer, que mi peque no hacía nada raro, no tenía esa horrorosa enfermedad llamada "mamitis" , tampoco es que fuese madrero, no pasaría nada por darle teta cada vez que pidiese, no era ningún vicio, no me estaba usando de chupete. Y, ¡comenzamos a dormir!, ¡siiiiii!, a mi lado, cerquita, barra libre toda la noche, pfff, total, ni me enteraba. Ahora sí estaba disfrutando de mi maternidad.

La lactancia de la peque menor, está siendo maravillosa. Tengo experiencia, las ideas claras, instinto.

Creo, que para que una lactancia sea exitosa, debes querer y desear dar teta. Debes tener muy claro qué es dar teta, lo que esta maravillosa experiencia significa. Saber que un bebé jamás se queda con hambre porque tus pechos producen la cantidad suficiente de leche. Que un bebé no llora únicamente de hambre, necesita, protección, cariño, amor, sentirte cerca, es un instinto de supervivencia. Que el sueño de los bebés es diferente al de un adulto, que no se despierta porque sea culpa de la teta.

Yo me siento poderosa cuando doy de mamar, satisfecha, me siento madre, mamífera, siento que doy amor, protección, cobijo.

Recibo amor, caricias en la panza, en mi brazo, en mi cara.

Gracias hijos míos por hacer que yo, sea una madre mejor.

Os quiero.